¡PONTE LAS PILAS! Vive la vida y no te lamentes más...

  

   La vida es muy corta como para desperdiciarla en estar enojad@s todo el tiempo, o tener obligaciones en la vida que no nos gustan, incluso que ni queremos hacer, estando con la persona que ni queremos, que no somos felices, y que obvio, ni amamos, rodead@s de personas que no nos aportan nada a nuestra vida, de hecho la amargan, teniendo la oportunidad de hacer cosas que nos apasionan, nos gustan, nos hacen felices, disfrutar de la vida con seres queridos, sean familia, hijos, pareja, amigos, conocidos y hasta el perro o el perico, pero que nos hagan felices,  que nos aporten cosas lindas, bellas, felicidad, entusiasmo, que saquen lo mejor de nosotros, y, recíprocamente, reír, llorar, tontear, pasear, y tantas cosas que son gratis, que no necesitamos comprar como un abrazo, de esos del oso que todos necesitamos alguna vez, un beso, ese apoyo, esa palmada en el hombro que te hace sentir bien, aunque todo el mundo se esté derrumbando, etc.

    Repito, la vida es muy corta, NO LO OLVIDES, de lo que hoy te quejas, quiero decirte que el día de mañana te cuestionarás porque no lo disfrutaste más, porque no reíste más, porque no lo aprovechaste más, y eso pudo haber pasado cuando tenías 15 o 20 años, y hoy que lo recuerdas, puede que tengas, 30. 40 , 50 o más, y ya no sea tiempo de lamentos, de reproches, aunque recuerda que NUNCA SE ES DEMASIADO TARDE para decidir ser feliz. 

    Hace unos años, recuerdo unas bodas colectivas, que se hicieron y que pudimos ser partícipes, y recuerdo dos viejitos, aproximadamente de 80 - 85 años de edad, ambos viudos, con una ternura inigualable y para muchos muy envidiable. Decían haberse conocido, pero nunca más volverse a ver, y días anteriores se reencontraron y en ningún momento dudaron en estar juntos de nuevo, viviendo esa historia que pudieron haber vivido mucho tiempo atrás, pero que ese día era su realidad. Y que solo Dios sabe porque pasan las cosas, tal vez, no hubiera funcionado, o tal vez hubieran sido la pareja mas feliz. En fin, su realidad era que a su edad estaban viviendo el momento más felices de sus vidas, y no se arrepentían de ello, y mucho menos les importó la edad, solo sabían que tenían que vivirlo y disfrutarlo, por lo que les quedara de vida; por ello digo, nunca es demasiado tarde para ser feliz. 

    Hay una frase que me gusta mucho, y es que: “El Pasado, ya pasó, el futuro es incierto, y lo único que te queda es el presente”, Vívelo al máximo, no lo dudes ni un segundo, eso es todo lo que tienes en el aquí y ahora, y no hay más.
    

   Un día, platicando sobre experiencias gratas y no gratas, pero vividas, me dijeron: “No te preocupes, mucho menos te cuestiones si lo hiciste bien o lo hiciste mal, recuerda que: ¡¡¡La decisión que tomaste en ese momento, fue la mejor que pudiste haber tomado, no hay más!!!!” Y es cierto, escuchamos muchas veces a muchas personas decir:”Debí haber hecho… Si hubiera tomado x o y decisión… Si yo hubiera dicho… Si no l@ hubiera dejado…” pero él hubiera no existe, lo hecho hecho esta, y no hay vuelta atrás. Lo más importante de todo esto es: Acéptate, perdónate, libérate, deja de quedarte ahí lamentándote, lamiendo tus heridas, echando limón a la herida, o cómo quieras llamarle, ya ¡BASTA! Sécate las lágrimas, si es que estás llorando y lamentándolo, pon la frente en alto y sigue... Continua con tu camino, no dejes que nada, ni nadie pueda detenerte. Que como dicen por ahí, tus lagrimas no te dejan ver el arcoíris que está del otro lado. Que la vida, cuando menos pienses, ya se acabó y ahí si te lamentarás por no haber hecho lo que deseabas.
  

  Has cosas diferentes, arriésgate, péinate diferente, cámbiate el color de pelo, ponte ropa nueva, un perfume nuevo, un vestido, una corbata que tal vez no usarías, déjate la barba, o quítatela, ve al cine, conoce gente, cambia el café que tomas por un sabor nuevo, toma las riendas de tu vida, no te quedes ahí sentado viendo la vida, las oportunidades y hasta el amor pasar, que nada llega por casualidad, y mucho menos llegará a tocar a la puerta de tu casa, al menos que sea un testigo de Jehová, (sin que se ofendan, pero ellos si llegan a tocar a la puerta de tu casa, los domingos a las 8 am, jajajaja… Solo cuida que no te encuentren todo dormido, porque así ni la mosca te volteará a ver), 
  

  Ten en cuenta que lo que dejes de hacer hoy, la vida y la culpa, lo cobran bastante caro,  te lo recordarán a cada momento, Ten presente y nunca lo olvides que:

“NUNCA SE ES DEMASIADO TARDE PARA COMENZAR DE NUEVO”
estés en las condiciones que estés, 

y menos si es algo que ¡¡¡te apasiona!!!!

Pero sobre todo:

“¡NUNCA  DEJES DE SONREÍR!”

No sabes a quién puedes hacer feliz con una sonrisa, e incluso,
no sabes a quién le puedes estar cambiando la vida.


No hace falta decirlo, pero lo diré:

¡Vive la vida al máximo, como si hoy fuera tu último día!

Y notarás la diferencia, te sentirás pleno, satisfecho y muy contento…

L@uR!5